Para esto, es necesaria una reflexión epistemológica que permita la incorporación y el diálogo con otros saberes, como el popular y el colectivo, en la producción de conocimiento. Se pretende comprender cómo las prácticas y los significados construídos por lo moradores, en su historia, contribuyen a la localización de elementos emancipatorios, en el sentido de la superación de las condiciones sociales hoy existentes.
Se muestra fundamental el estudio de los y con los movimientos sociales, entendidos como espacios privilegiados en los cuales son construídas identidades, significados y posibilidades; basadas en la experiencia práctica, concreta y cotidiana, para la trascendencia del presente. Para el objetivo propuesto, son necesarios dos procedimientos: (1) tener la disposición para un diálogo crítico con los movimientos, esto es, la consideración de los mismos como sujetos productores de un conocimiento legítimo, pero no necesariamente correcto; (2) Articular ese esfuerzo con una mayor contextualización económica, política y territorial, a partir de la utilización de una mirada teórica crítica, a fin de visualizar mejor los vínculos intrínsecos entre los procesos locales y las dinámicas globales y vice versa. Además, es central abrir nuevas miradas, flujos y movimientos del presente, sin considerar los fenómenos estudiados de forma estática, sino como procesos de construcción y abiertos. En este marco, fue necesaria la adopción de una metodología cualitativa de investigación, combinando diversas técnicas, como: observación participante, entrevistas semi estructuradas y grupo focal.