El G20 se impuso como la institución de coordinación de políticas en los ámbitos macroeconómicos, financiero y comercial, sin desplazar a las organizaciones internacionales formales competentes. Por el contrario, impulsó acciones para fortalecerlas, con éxito diverso. En materia comercial, la GR paralizó las negociaciones de la Ronda Doha de la OMC. En materia de política macroeconómica se afirmaron compromisos de compatibilización y se fortalecieron el FMI y el BM. Donde más parece haberse desarrollado la gobernanza internacional ha sido en materia financiera. El Consejo de Estabilidad Financiera (CEF) pasó a desempeñar un papel clave en la coordinación de la regulación y supervisión de los sistemas financieros nacionales, y en la coordinación de los cuerpos de definición de estándares con el objetivo de formular estándares de alto nivel como instrumento de prevención de las imperfecciones de los mercados, agentes y productos financieros, bancarios y no bancarios. Aumentó la cooperación del CEF y el Banco de Pagos Internacionales y el FMI en el ámbito financiero.
Primero expondré la transformación de la gobernanza internacional, en particular en materia financiera. Después haré una evaluación de los criterios de política y reformas definidos internacionalmente y de los calendarios de metas establecidos. Finalmente examinaré los límites de estas propuestas para resolver los problemas del ámbito financiero en los que radica parte de la explicación de la GR.