El marco regulatorio minero argentino actual se ha mostrado insuficiente para comprender la magnitud de los impactos que genera la actividad minera de escala, incorporar la multiplicidad de actores que afecta, sin contar su incompatibilidad con la legislación ambiental. Todo esto, más el inicio de la actividad minera metalífera de escala en la provincia de San Juan, Argentina a partir de 2003, despertó en las poblaciones localizadas en el área de influencia del proyecto preocupaciones, incertidumbres y miedos, estrechamente vinculados a la falta de información sobre los procesos productivos de la minería y el peligro ambiental que estos implican.
Las zonas de influencia de los megaproyectos mineros comprenden pequeños poblados, aislados (respecto de los centros urbanos), de escasa población, equipamiento y servicios, gobiernos locales débiles y marginales hasta entonces a la economía de la provincia. Poblados que a partir del desarrollo minero se ven insertos en circuitos de economía globalizada, que contribuye a generar un crecimiento anual del PBG del 16,6%, que ha crecido desde el año 2003 hasta hoy en un 115%, el mayor de toda la Argentina basado en la explotación de recursos no renovables.
Esta ponencia pretende poner en evidencia cómo se define el riesgo desde el marco regulatorio actual, qué riesgos se identifican y cuales se dejan de lado, esto es, los peligros a los que se expone la vida humana y el ambiente.