La política pública analizada, denominada originalmente como Programa Comunidades Vulnerables –en adelante el Programa-, tiene por destinatarios a “jóvenes vulnerables, en conflicto con la ley penal o en riesgo de estarlo”y fue construida como el dispositivo destinado a poner en marcha una lógica de prevención social del delito orientada a jóvenes, en el marco de una propuesta más amplia de prevención integral del delito que supo ser de escala nacional hasta el año 2008 (el Plan Nacional de Prevención del Delito).
Metodológicamente recurriré al análisis de entrevistas realizadas entre julio de 2008 y febrero 2010 a operadores y ex operadores del Programa en la Ciudad de Buenos Aires, a coordinadores y ex coordinadores del mismo y a aquellos técnicos que participaron en el diseño y coordinación del Plan Nacional de Prevención del Delito. En el mismo sentido, se analizarán las entrevistas a los responsables de otras políticas públicas que se articularon de modo diverso con el Programa específicamente analizado, así como las realizadas a algunos de sus destinatarios.
Asimismo, serán analizados en calidad de fuentes secundarias documentos públicos y de curso interno vinculados al Programa y a las características que asumió en la jurisdicción seleccionada.
Como fuerte emergente del análisis se señalará la tensión entre un diagnóstico que insiste sobre problemáticas estructurales y una práctica focalizada que es intrínsecamente incapaz de lidiar con ese mismo diagnóstico.