Contrafuegos De La Investigación Social Digital. Oportunidades Para Las Ciencias Lentas, Los Objetos Menores y Las Prácticas Investigadoras Críticas
Este espacio de posibilidades se ve hoy día cooptado por el dominio neopositivista, la impotencia ante la producción masiva de datos y la fetichización de ciertos objetos privilegiados. No solo aparecen en la realidad fenómenos solidarios con aquello que Bourdieu llamaba revolución conservadora (1999), sino que la ciencia social hegemónica aplicada al espacio digital también está siendo solidaria con ella epistémico-metodológicamente.
Tomando de Lupton que una tarea fundamental de la sociología digital es el análisis crítico de medios digitales y su vinculación con el capital y el poder; pensamos la posibilidad de ejercer la investigación social como una práctica crítica de retaguardia. Contra el intelectual de vanguardia, que sigue modas y opera con sus objetos de actualidad directa e irreflexivamente; el investigador de retaguardia sabe que sus fenómenos de interés son producidos por grupos sociales que se defienden simbólica y políticamente. Esas defensas pueden provocar censuras y violencias directas contra las investigadoras que ponen el cuerpo en sus investigaciones. Por ello, siguiendo a Bourdieu y desde una perspectiva feminista que persigue una ética de los cuidados, proponemos abordar estos fenómenos sociales y sus lugares de producción lateralmente, a través de otros, análogos, que no presenten tantas resistencias: valerse, así pues, de las homologías estructurales que también podemos encontrar en el espacio digital.
Presentamos asimismo, como ejemplos de estas prácticas propuestas, dos investigaciones: una finalizada (sobre esoterismo digital) y una en curso (sobre amistades en el espacio digital).